sábado, 5 de julio de 2014

Niña de Leñadura

Niña de Leñadura

Niña de leñadura sabes bien
Lo que yo siento
En el fogón de mi vida
Fuiste la encendida llama
Talvez encuentres la calma
No pretenda parar el viento
Yo vengo del mar Austral
De allá donde el viento brama.

Como el humo de mi cigarro te desapareces
Y en el entretanto de tu vida enamorada
Siempre anduviste sola triste acongojada
Puedes sentir pación y no se te realice
Que en las lides del amor yo te quise
Se tornase esquivas y corrido el velo
Yo te gritaba mi vida espérame en el cielo
Y el piadoso cielo me mando el aviso
Para que termine con mi dolor solamente quiso
Para que los amantes de la tierra rompan el hielo   

El hombre desde que llego al mundo
Su vida es transitoria
Y a su alma y a su vida más se aferra
Y amándonos del cielo bajamos a la tierra
Algunas al bajar perdieron la memoria
Perdieron el arco iris de su pasada gloria
Del valle del amor tal vez decidan
Como los pájaros que en los árboles anidan
La tierra tan hermosa frágil y caprichosa
Vivirla con vos en un rancho o en una choza
Mientras sea con vos no importa si me olvidan

A vos mi china querida
Que me has iluminado el alma
Has desenredado el embrollo
Sos de mi tierra Aysenina
Agua de mis arroyos
De mi patagonia paisana
Que bajan de la montaña
En cascadas cristalinas
Que en auroras tempranas
Mi canto que en fresca mañanas
Le alcanza un mate a mi china

La pación y la virtud de esos labios rojos
Que al final de la tarde se quedaba recostada
Y en los andes patagónicos dormitaba
El centralismo roñoso le causaba enojos
Era una paisana de esos lindos ojos
Niña morena reflejo de la madrugada
Cuando vos ya no creías en nada
Conocí de tu alma y de tu tierno regazo
Llegaste con tu corazón hecho pedazo
Te fuiste como la canción desesperada
En penumbra mi amor galopa en penumbra
Donde termina el día y la tarde se vuelve noche
Dirás amor que la tarde muere con tus reproches
En penumbra como el fogón que ya no alumbra
Abrasados nos quedamos y el cóndor no se encumbra
La felicidad pasa al galope por el sendero
Nadie dirá que te amo nadie dirá
Que aun te quiero
La tarde llegaba al mirador piedra del indio
Y otra vez el amor se fue con el río sin decir adiós
 Al final en penumbra en penumbra por ti muero.





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