Zorzal Patagón

                        Aysén

De tus labios poemas, versos y prosas

Y tu amor se pierde en la distancia

En tu jardín juegan las mariposas

Como abejas en la miel dulce fragancia

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En el Aysén y allá en las altas cimas

Están los gauchos pialando, y sus destrezas

Y los cantos y prosas y sus rimas

Te abren las ventanas pa que veas sus bellezas

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Cuando la llovizna, de la tarde, no te moja

El arco iris, al final de la laguna un tesoro

Por nuestra frágil tierra de hojas

El Aysén, en Coyhaique tiene, un corazón de oro

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Y allá en el Tortel el zorzal una vez dijera

El espíritu del bosque tan azul y tan mío

Amando el manzano lo beso la primavera

Y se fue cuesta abajo por amor como mí río

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Y a orilla del Baker mi gente te saluda

Y mi alma grita por vos muchacha hermosa  

En el río turquesa deje mi alma desnuda

Y fui un clavel celeste en tu jardín de rosas

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Por que buscas en los cerros las blancas perlas

Decidme si has encontrado una en el ocaso

Si en el mar, la luna llena, puedes verla

Pero no tomarlas, con tus manos, por si acaso

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Cuantas veces de la piedra del indio

De arriba miraba al Simpson sus riveras

Bajando pal. Puerto del Aysén una pena me dio

Y el río dentro de mi alma parece que corriera   

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Se escucha como una vos del infinito

Y a iluminado la conciencia mía

Como un desgarrador y desesperado grito

Me trae nostalgias y melancolía

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Y hoy me conmueve,  Chile Chico tus misterios

A la tierra mía, le presentaron, batalla

Y venían de un poderoso, imperio

Y rugió el puma, hace un siglo, y el déspota calla

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Y en el fragor de la lucha pusieron el pecho

Mientras en el lago bramaba un oleaje profundo

Cuando las fieras nos rodeaban al asecho

Mis gauchos se llenaron de gloria para el mundo

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Romántica, tierra paisana, y salvaje

Fuiste paraíso, y el jardín, del edén

Y para todos, fuiste territorios, del Aysén

Enamoraste, a todos, con tus  paisajes

No dejes, que los de afuera, te ultraje

Abriste ventanas, y puertas, en tu rancho

La tranquera abierta, entraron, los caranchos

Desgarran, de tu vientre, los glaciares, tu piel

Ventisqueros, y ríos y al amigo, más fiel

Son buitres, carroñeros, cuidado con tu rancho

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Para darte a conocer

Tuviste que incendiarte Aysén

Nadie se dio cuenta que eras el Edén

Del Aysén sos el renacer

Que no te hagan desaparecer

Te fustigan y que abandones primero

Y abren las puertas al extranjero

Te negaron siempre el derecho a vivir

En tu tierra te niegan asta sobrevivir

No te rindas criollo fuiste el pionero

                                 

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Si a mi tierra hoy le canta

A un paisano que de afuera llega

Ese paisano se entrega

Y con su guitarra se planta

Mientras una mozas lo encanta

Moviendo a un costado la cabeza

Y con esos ojazos lo embeleza   

Y el paisano queda prendado

Como gaucho y enamorado

De una tierna mirada a la moza la besa

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Y otro gaucho levantando la frente

Mientras la moza tomaba asiento

Que con un triste sentimiento

Se sintió como indiferente

Volvió a mirarla fríamente

Por lo que había visto y pasado

Sintió en su pecho clavado

La traición clara y sentida

De aquella que era su vida

Con la mirada lo había engañado

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Y todos se dieron cuenta

Quedo la guitarra en suspenso

Y en el aire un silencio inmenso 

Y el cantor que se inquieta

Sintió en su alma de poeta

Y un rasguido en sus cuerdas sonoras

Y le canto a las auroras

Viendo que el día se avecina

Les canto a las niñas Ayseninas

Los estilos más dulces de esas horas

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Se encendieron sus miradas

El que era un mozo resuelto

Sin querer se encontró envuelto

Como en rojas llamaradas

Y esas voces  levantadas

Que en silencio se escucharon

Y entre la paisanada despertaron

Mientras la guitarra reposa

En aquella china buena moza

Que los gauchos le cantaron

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Quedo el mozo estremecido

De ese canto prodigioso

Inclinaba el rostro hermoso

Con sus ojos enmudecido

No es que me sienta vencido

Ella sucumbió a sus encantos

Yo soy un hombre y me planto

Cuando una china no te quiere

Siempre hay otra que te prefiere

Y te enreda con su encanto

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Los gauchos con su desvelo

Ven por donde se va la luna

Y al reflejarse en la laguna

Sienten que se cayó del cielo

La luna aquí busca consuelo

Ella que luego implora

Al alma gaucha que allí mora

Que en esos tiempos de antes

Al ver esos astros gigantes

De pena una guitarra que llora

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Veo en las llamas del fuego

A nuestros campos incendiados

Quisiera verlos  arados

Vi los árboles ser presa luego

Como para ellos tal vez fue un juego

Luego sintieron el remezón

Cual habrá sido la razón

Esto no tiene armonía 

Al quemar Patagonia

Parecían sin corazón

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Cuando a esas tierras llegaron

No había nadie ellos vieron

A Antolín Silva Ormeño lo siguieron

Con Belarmino Burgos lucharon

Y Santiago y Alejandro Fica pelearon

Por que grandes consorcios entraron

Que los gobiernos desleales entregaron

Y al usurpador José Menéndez

La pampa y luego los Andes

Y a los patagones mataron

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Llegaron los milicos rastreros

Vendidos a los poderosos

Vinieron defendiendo cosos

Quemando ranchos y potreros

Y horrorizados se sintieron

Respondió el paisano con valentía

Puso el pecho a la apatía

Que ya había poblando el terreno

El centralismo lo dio por ajeno

Quitando la Patagonia mía

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Yo que siempre, ha mi tierra, e querido

Donde mis gauchos, te han amado

Y con el tiempo ese aire, puro, ha respirado

Y de canto, y folklore, se ha nutrido

Amo ha ese río, allá en mi pago, querido

Que el campo, de hielo, se repliega

Crece el pascua, y el Baker, se anega

Con su guitarra, Nicasio Luna, en el llano

Payándoles esta, a sus paisanos

Por amar tanto, a Patagonia, se entrega

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