Que tonto y torpe, mi
corazón, iluso
Pensó que entre
nosotros, no había distancia
Que la vida para
probarnos, celos, puso
Y el amor con sabor,
a reminiscencia
En ese rancho, eras
inocente y pura
Donde dormían, los
sueños, de tu infancia
Porque amor, sigues
insegura
Vacilante luz, de las
Lengas, y en tus ojos veo
Deslumbraba en
rededor, de tu hermosura
Y mi pación, gritaba
de deseos
Te abordaba, tímida,
e inquietante
Por la loma de mi
tierra, descendía
De la Patagonia,
frágil y penetrante
Cuando en el Aysén,
sus bosques se encendía
Es mi selva, que
clamaba, por piedad
Las moto sierra y
chiperas, imponen miedo
También los arroyos y
ríos, mueren de ansiedad
En el bosque se
escuchan, los gemidos
Los árboles hacen
llorar, los cielos
Y los campos, de felicidad,
se ponen verde
Y las ramas protegen,
de la lluvia los suelos
Se forman los ríos,
que en el mar, no se pierde
Se evaporan, sigue el
ciclo y sube
Y la lluvia forma,
lagos, y se encierra
Y en el cielo,
nuevamente, se forman nubes
Otra vez recibe, en lluvia,
las aguas mi tierra
O” cielo azul, que
cubres, la Patagonia, frágil y tierna
Y el lucero del alba,
que mira
La densa oscuridad,
del que gobierna
la juventud, los
pillo, con la mentira
amada juventud, que
te llevaste
los días más hermosos,
de mi vida
las luchas
apasionadas, en las calle
las calles, les
pasara, por encima,
la lucha que se pierde,
es la que se abandona
seguir luchando
aflojar ni cagando…
hay que echar a los
ladrones
de cuello y corbatas
esa es libertad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario