LO QUE AMERICA SIENTE

América siente el rebramar de los volcanes
del tsunami en el mar embravecido
que le ha hecho el hombre, y aun no se dan por vencido,
es la tierra que rechaza tus desmanes.


El Arauco nació de la profunda madre tierra
orgulloso de esa raza que murió, y vibro por su bandera
y el pago como siempre del chileno (vergüenza ajena)
le niega el derecho de vivir, en su amada cordillera.


Después que fuisteis cual centauro del olimpo,
donde los dioses de la Grecia te envidiaron,
Caupolican por defender tu Chile, te inmolaron,
Lautaro, y Galvarino también tus brazos te cortaron.


En la selva del arauco se oculto en el follaje,
y el español, le prendió fuego el salvaje,
la raza castellana, permitió el ultraje,
fuimos robados, hasta en el ultimo viaje.


De América morena, que no quiso ser esclava
busque la luz, en la noche mas oscura
vi, el Arauco vibrador, con inocente bravura
defendiendo su tierra, que el español mancillaba.


Donde la rosa de los vientos, es reina y soberana
en el cono sur de América, se enciende su hermosura
la Patagonia descubre, su inocente ternura
entre impenetrable monte el gaucho,
apela su condición humana.


Labio sediento, que pone tu amor en movimiento
disculpame si soy el amante que rompió tus normas
capricho sublime, que en mi sueño me da forma
como un triste árbol, que se le ocurrió vivir en tu desierto.


Mi canto es como tropilla de esperanza
que vengo arriando en el tiempo
y largo mis sentimientos
por las pampa de america manza.


Y del fondo del mar emergió los Andes,
trajo conchales, fósiles, ostras, perlas y minerales
y del Arauco la raza vibradora, de río y manantiales
y con ella la Patagonia aunque frágil, cual gigante.


Y aquí, en plena roca, una vertiente brota
donde las piedras, se mojan cuando llora el de arriba
donde los arboles crecen en la piedra viva
y por la Patagonia la mano del creador se nota.


Fue la Patagonia, el horno donde la roca ardía
y el mundo vio que en llamas florecía
pidió perdón por lo que hacían
mientras el creador sufría al ver esa herejía.


Las agua y los ríos por el calor sufria,
si he de morir por vos, que sea escribiendo
entre montañas glaciares, y río feliz me voy muriendo
arboles milenarios, testigo mudo de una cruel hipocresia.


Viene el patagón, y en su alma trae un grito
de un temporal que te reclamo
que nos ha hecho el centralismo
vendernos como judas vendió a cristo.


Y el que puso el pellejo en Chile Chico
somos sus hijos, de los que lucharon fiero
donde la tierra gaucha libre quiero
donde salieron corriendo los milico.


No todo es pa los gringos, hermano la tierra llama
el puma de mis bosques es bravío,
que te hace temblar las carnes de frió
somo la Patagonia, de aya donde el viento brama.


Es todo lo que America siente,
esta lucha es bastante larga,
en la trágica y amarga
historia del continente.