domingo, 17 de mayo de 2015

los latidos del corazón

del poema  3

Si escucharas mis llamados
de Patagonia en mi canto 
no llores muchacha en llanto
esos sueños que fuerón dorados  
de aquellos tiempo amado.

Ecucha mi corazón
cuyos huérfanos latidos
no quedara en el olvido
cuando llegue la ocacion
de esta terrible pación.

Por no querer perdonarme
te has quedado en mi desvelo
voy buscando consuelo
en otros labios quieran besarme
tal vez puedan mujer amarme.

No dejes en mi ese dolor
si mi corazón está de duelo
te dije que buscare consuelo
porque me espina esa flor
porque vida sufro de amor.

Yo te ofrecido las palma
aunque este triste y dolida
yo te ofrecido mi vida
para que vos me regale la calma
por esas cosas del almas.

Amor lejos de toda guerra
llegare al rancho donde vive ella
es una dulce y frágil estrella
que baila alegre allá en la sierra
los chamame de nuestra tierra.

Corren arroyos y olas pastizales
con caudales muy estrechos
curbas y cascadas en su lecho
azules alas con notas musicales
con guitarras del Mañiguales.

Si mi amor por ti yo me muero
así es mi Aysén de mi flor
y en cada valle un cantor
en cada fiordo un ventisquero
y en tus libres glaciares te quiero.


           

jueves, 14 de mayo de 2015

LA MAGIA DE MI AYSÉN




            del poema Aysén

       Las razones de las regiones  
su forma de ser lo realiza
por muy apurado va de prisa
encandilados camino sin ilusiones                              hay empieza las complicaciones

Siempre usas diplomacia
como Aysenino en desgracia
con tu gente pone cuidado
y no te quedes aprisionado
en recuerdos de tu infancia.

Que el eterno te escuche chico
le de luz paz a tu tierra igual
el espíritu celeste guié a Guadal
y no quiero irme de hocico
voy despacio camino a chile chico

Y el Luperciano lo comprenda
y la gente de la cereza entienda
y el dios que amas le implores
y por respeto a tus mayores
y a tu chile chico lo defiendas.                                                                                             
Y aqui me largo a cantar
ya que me ciento convidao
aun que ando por otros lao
en Magallanes cerca del mar
a mis paisanos  voy saludar.

Y un abrazo patagón quisiera
ya que no invitan a cualquiera
que por ausencias estoy frito
de la tierra austral les pego el grito
disculpen deje abierta la tranquera.

Ya que en esto no soy ducho
andaré cantando mis verdades 
en tiempo y caminos de soledades
y de tan lejos igual los escucho
a mi terruño lo extraño mucho.

Su algarabía me contagia
está nevando en mis nostalgia
que en mi mocedad fue tan mío
cordilleras lagos quebradas y  río
tiene poesía tiene canto tiene magia.






Aysén

domingo, 10 de mayo de 2015

A LOS CARA E PALOS

            A LOS CARA E PALOS

             DEL POEMA AYSÉN

Hay hombres que luchan pero son poco
sin equilibrio y no son geniales
se llenó el congreso de pinochos loco
esos no razonan son peor que animales.

Honorables senadores vuelven a la carga
hacen súper acuerdos con sus demencias
como unos corruptos que al país amarga
son muy eminentes pero si conciencia.

Se las dan de noble y no dan abasto
se proclaman salvadores y justiciero
pobre pueblo mío lo echaron a los trasto 
malditos Satanás tienen patas de carneros.

Yo se que nunca volverá hacer como antes  
Calíbula es su ideal y por el se desangran
lo defiendan a muerte pero están distantes
y de mandinga en Chile se consagran.

Se engañan solo se creen intocable
viven como reyes en el congreso
su nobleza mañosa y corruptible  
ladrones de porquería los metería preso.

Yo se que en la vida todo se acaba
poder abusos delirio de grandezas
su soberbia todo los menoscaba
sos un papanatas vendido a la realeza.

Nosotros torpes  le creíamos todo
nos iban a ayudar una vez en la vida
el senador o diputado encontró el modo
se preocuparía de nuestra tierra querida.

Y ahora me voy sin rumbo fijo
viejo y cansado de creer en este país
le dejo esta experiencia a mi pobre hijo
y no crea que por ellos nunca sera feliz.

Un consejo a los jóvenes de este reflejo
no le creas nunca a nadie por estar de fiesta
pásala bien y por creerle mira a tu viejo
no los pesques nunca mándalo a la cresta.